En los últimos años la presencia de especies exóticas invasoras en nuestros ecosistemas ha provocado graves impactos, no sólo ambientales y de gestión del paisaje, sino también, y cada vez con mayor relevancia de tipo sanitario. En concreto, se sabe que las especies de fauna invasora pueden servir como vehículo de transmisión de organismos infecciosos y parásitos a seres humanos y otros animales presentes en estos ecosistemas. Muchas de estas infecciones y parasitosis en algunos casos se comportan específicamente de igual forma como una nueva “enfermedad invasora” en el medio que puede acarrear graves consecuencias para la biodiversidad, el buen estado del ecosistema y la salud humana /animal.
Es por tanto necesario, plantearse la problemática de las especies de fauna invasora, no solo como una situación de riesgo ambiental y económico para los territorios por los que se distribuyen, sino también como una oportunidad para fortalecer la investigación y el trabajo de gestión en salud pública y ambiental desde diferentes ámbitos profesionales, con el fin de prevenir futuras situaciones de riesgo sanitario. Con esta perspectiva, y teniendo en cuenta la problemática asociada a la gestión de territorios con especies invasoras, se pretende de alguna manera incorporar una llamada de atención social a lo que supone la presencia de estas especies en nuestros ecosistemas